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En la cuerda floja

El presidente de Perú, Pedro Castillo, solo lleva poco más de una semana en el cargo y son muchas las voces que anticipan que sus días en el poder están contados.

Castillo comenzó mal. Su primer acto de gobierno fue la integración de su gabinete. La designación de varios de sus ministros ha causado un enorme rechazo, empezando por el presidente del Consejo de Ministros y de otros funcionarios, que en apenas horas han tenido que ser removidos.

Se trata de personas que no poseen ni las competencias ni la experiencia en el sector público, ni la estatura moral y ética para desempeñarse en los más altos cargos del Estado. Se destacan por su militancia y cercanía al convicto Vladimir Cerrón, líder de Perú Libre, el partido marxista y leninista con el que Pedro Castillo llegó a la presidencia. 

Pedro Castillo y Vladimir Cerrón.
La fotografía está como tuit fijado en la cuenta @VLADIMIR_CERRON

Como si fuera poco, algunos de los designados han sido denunciados o investigados, otros sancionados o multados por violar leyes e infringir normas. Más que hoja de vida, lo que muchos están mirando es el prontuario de los cuestionados elegidos por el flamante presidente.

Para algunas muestras, un botón

  • Guido Bellido, presidente del Consejo de Ministros. Investigado por apología al terrorismo por su pública afinidad con Sendero Luminoso. En Facebook ha difundido comentarios homofóbicos, misóginos y afines hacia regímenes dictatoriales como el cubano o norcoreano.
Su aversión a los homosexuales y su admiración a Fidel Castro
El primer ministro Bellido y sus comentarios machistas
Tiene a la dictadura de Corea del Norte como una referencia positiva
  • Iber Maraví, ministro de Trabajo y Promoción del Empleo. Según informes de la policía, está vinculado con líderes radicales relacionados con el Movimiento por la Amnistía y los Derechos Fundamentales (Movadef), considerado el brazo político de Sendero Luminoso.
  • Juan Silva Villegas, ministro de Transportes y Comunicaciones. Ha recibido multas de tránsito por faltas graves y leves en 2015, 2016 y 2019. Hace 10 años fue denunciado por su expareja por agresión física y psicológica.
  • Walter Ayala Gonzales, ministro de Defensa. Abogado y suboficial retirado de la Policía Nacional del Perú, pasado a disponibilidad (suspensión en el cargo) en 1997 por medida disciplinaria. Se le cuestiona no tener experiencia en el sector militar.
  • Héctor Béjar, ministro de Relaciones Exteriores. En los 60 recibió formación guerrillera en Cuba y conoció al Che Guevara. En 1965 dirigió el Ejército de Liberación Nacional y luego fue apresado por sedición. Colaboró con la dictadura de Velasco Alvarado.

El último escándalo tiene que ver con Grover Mamani Condori -ala de los ultraradicales- que fue elegido para el cargo de director de Gobierno Interior. Mamani Condori no posee las competencias -no tiene título universitario ni experiencia- para el ejercicio de tan importante puesto y su nombramiento provocó la renuncia de dos viceministros del Interior.

Fuentes: El Comercio, La República, Perú 21

Un corrupto poderoso

La lectura que se le ha dado a estos criticados nombramientos (y con razón) es el poder real que está ejerciendo Vladimir Cerrón, el secretario general de Perú Libre. Cerrón tiene secuestrado al nuevo gobierno y mantiene a Castillo de manos atadas al exigirle reciprocidad por los favores prestados. 

Vladimir Cerrón, el poder detrás de la presidencia del Perú

Al fin y al cabo, el presidente peruano era un total desconocido en el ámbito nacional hasta que por los vericuetos políticos y electorales pasó a disputar, impulsado por Cerrón y el resto de la izquierda peruana, la segunda vuelta con su contrincante Keiko Fujimori, quien arrastraba una pesada carga de investigaciones en su contra, más el nefasto legado de su padre en materia de autoritarismo, corrupción y abuso a los derechos humanos.  

Vladimir Cerrón tiene sus propias cuentas pendientes con la justicia. En 2019, el entonces gobernador de Junín, fue sentenciado a 4 años y 8 meses de prisión por los delitos de “negociación incompatible y aprovechamiento del cargo” al favorecer a un consorcio para la construcción de una obra. Como reparación civil, la jueza Susan Carrera determinó un pago de 850.000 soles (unos 207.000 dólares) y dio orden de captura.

Tras esconderse, Cerrón a los pocos días se entregó a la justicia. Por casi 2 meses estuvo preso. En octubre de 2019 sus abogados lograron que la Sala de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de Junín ordenara continuar el proceso judicial en libertad y redujo la pena a 3 años y 9 meses.

El Ministerio Público retomó el caso y hace una semana solicitó al tribunal la prisión efectiva de Cerrón por no haber pagado el monto por reparación civil, pero en un reciente tuit con fecha del 5 de agosto, el secretario general de Perú Libre indicó que ya había cancelado la reparación civil.

Cerrón anuncia que pagó la reparación civil impuesta por la jueza Carrera

Por otro lado, la Fiscalía pidió que se ampliara la investigación sobre la relación de Vladimir Cerrón con el caso de “Los Dinámicos del Centro”, una red criminal involucrada en la emisión ilegal de licencias de conducir en la región de Junín a cambio de la obtención de beneficios económicos.

Fiscalía señala a Cerrón en el caso de la emisión ilegal de licencias de conducir en Junín

Según la fiscal Bonnie Bautista, hay claros indicios de que Cerrón sería integrante de esta organización. De hecho, en las indagaciones adelantadas por el Ministerio Público, se señala que con el dinero obtenido por estas acciones criminales, supuestamente se financió la campaña electoral de Perú Libre y se pagó la reparación civil impuesta a Cerrón por su condena por corrupción.

Y es este personaje que, además, tiene abierta en la Fiscalía más de 20 investigaciones por presuntos delitos de corrupción y lavado de activos, quien insiste en la necesidad de que el país tenga una nueva Constitución redactada por una Asamblea Constituyente.

“La Constitución debe ser el consenso de la clase opresora y de la clase oprimida que eligen un árbitro para evitar la violencia social (…) La revolución nace de la mano de una contrarrevolución. Por eso nunca se olviden de los tres niveles de lucha: el acceso al poder, el sostenimiento en el poder y algo que siempre se olvidan, la sucesión en el poder”, reflexionó Cerrón ante miembros de su partido el pasado mes de julio, en un mensaje con indudable tinte marxista. Su adoración por Fidel Castro no la oculta y, por el contrario, la exalta en sus redes sociales.

El secretario de Perú Libre, partido que llevó a Castillo a la presidencia del Perú

Un mal comienzo

El propio presidente Castillo ya enfrenta sus primeras investigaciones por la falta de transparencia en el ejercicio de sus funciones. El exparlamentario Edgar Villanueva interpuso ante el Congreso una denuncia por la presunta violación de la Constitución y la Ley 28024 al despachar fuera del Palacio de Gobierno.

En los primeros días de su mandato que transcurrieron en una residencia de Breña, hubo reuniones, nombramientos, juramentos y suscripción de documentos “fuera de la sede legalmente establecida”. Nadie conoce la agenda de actividades ni el registro de visitantes de esos días, lo que atenta contra “las normas de transparencia y actos funcionales”. Por eso Villanueva denuncia que estos actos deberían declararse nulos y sin efecto por el Congreso.

Por estas reprobables decisiones del Ejecutivo y el insólito ramillete ministerial -salvo pocas excepciones como la del ministro de Economía, Pedro Francke- es que ciertos analistas aseguran que con este equipo de gobierno, el mandatario busca tenderle una trampa al Congreso. ¿Por qué?  Porque la Constitución peruana determina que el presidente debe someter al Legislativo para su aprobación o voto de confianza, la designación del gabinete o Consejo de Ministros. 

El artículo 134 de la Constitución, la cual Castillo quiere reemplazar, establece que el “Presidente de la República está facultado para disolver el Congreso si este ha censurado o negado su confianza a dos Consejos de Ministros”.

Algunos vaticinan que Castillo estaría buscando precisamente eso: el rechazo de dos gabinetes por parte del Congreso para así disolver al Poder Legislativo y llamar a nuevas elecciones con la pretensión de elegir un parlamento afín a su gobierno (actualmente no tiene mayoría) y de esta manera conseguir la aprobación de su tan anunciada propuesta para convocar a una Asamblea Constituyente. 

Para evitar la disolución del Congreso y la imposición de un gabinete tan cuestionado que no interpreta los intereses de la otra mitad del país que no votó por Castillo, y que esperaba las primeras señales de moderación y pragmatismo frente al temor de un giro hacia la izquierda radical, ya se han dejado escuchar algunas voces al otro extremo que invocan la destitución del presidente.

Un gobierno sectario

La Constitución peruana en su artículo 113 también contempla la vacancia del presidente, entre otros motivos, “por su permanente incapacidad moral o física declarada por el Congreso”. Esta figura junto con la de la disolución del parlamento ya fueron aplicadas en los últimos cinco años, causando una gravísima crisis política e institucional durante la cual Perú tuvo cuatro presidentes y dos Congresos. Y este es un escenario muy peligroso que muchos no quieren repetir en un país empobrecido y dividido ideológicamente.

En una entrevista le pregunté al parlamentario por Perú Libre, Edgar Tello, sobre la posibilidad de que el presidente Castillo disuelva el Congreso y me comentó que tiene la expectativa de que el Legislativo contribuya a la gobernabilidad del país. “Esperamos que este Congreso sirva para dar confianza a los peruanos de que en Perú existe democracia. Y ello va a ser trabajando de la mano, el Ejecutivo y el Legislativo, para sacar adelante a nuestro país”.

Entrevista al congresista por Perú Libre, Edgar Tello

Con esta misma posición, recién declaró a un medio internacional el primer ministro Bellido al afirmar que el gobierno no tiene la intención de disolver el Congreso. “De ninguna manera va a ser eso un hecho ni una opción”. Enfatizó que ambos poderes del Estado “van en una sola dirección (…) para resolver los problemas fundamentales del país”.

Hay llamados al diálogo, a la negociación y a aplicar otros mecanismos de control político, como la censura de los ministros, por ejemplo, sin caer en la provocación y la confrontación con un gobierno que públicamente envía mensajes de conciliación con miras a trabajar por el futuro de los peruanos, pero que en privado pareciera negociar al Estado como un botín clientelista para sus cuadros de amigos comunistas.

El politólogo y profesor de la Universidad del Pacífico, Alberto Vergara, en una entrevista al diario La República advierte que es urgente que Castillo entienda que le fue otorgado el mandato de ser el presidente de todos los peruanos y no solo de un sector de la sociedad.

“No puede gobernar desde la arrogancia, la soberbia que se ha demostrado en estos días. No es presidente para proteger a un partido marginal y radical ni para formar un gabinete de incompetentes fruto de repartijas entre grupos angurrientos. Él es presidente para defender el interés nacional. Y si no entiende eso pronto, yo creo que la vacancia está a la vuelta de la esquina”, alerta Vergara.

https://larepublica.pe/politica/2021/08/01/alberto-vergara-en-los-hechos-pedro-castillo-ya-fue-vacado-por-vladimir-cerron

Peruanos descontentos

En las calles ya se ven protestas que piden la renuncia del primer ministro y de algunos cuestionados funcionarios del gabinete. También han salido los seguidores de Castillo en defensa de su gobierno. Las encuestas comienzan a registrar el sentir del país. Un sondeo de Datum establece que el 76% de los entrevistados piensa que Guido Bellido no es la persona idónea para el cargo, el 57% desaprueba al gabinete y el 51% está a favor de que el Congreso le niegue el voto de confianza.

En este clima de desconcierto, malestar y opacidad está por verse si este presidente, que le rehúye a los medios de comunicación y supo colar sus promesas acomodaticias de campaña electoral, empezará un segundo acto de malabarismo político para responder a los intereses de su partido, que no necesariamente son los de aquellos peruanos que buscan un cambio social apegado a los principios democráticos. Esos peruanos que anhelan un gobierno preparado y eficiente, que le sirva a la población con transparencia y que sea capaz de rendir cuentas, sometiéndose al rigor de la fiscalización pública y ciudadana, sin caer en la tentación de las represalias. 

Castillo debe gobernar también para esa otra parte de la población que teme un brusco timonazo a la izquierda que a la vuelta de unos años – ejemplos sobran en América Latina- lleve al país a una mayor pobreza, destruya su aparato productivo y cercene sus libertades civiles, garantías constitucionales y derechos humanos.

El presidente del Perú sabe que camina por una cuerda que amenaza con aflojarse en cualquier momento. Lo cierto es que él debe tomar pronto una decisión trascendental para su gobierno: marcar una sana distancia con Cerrón o consolidarse como su principal marioneta y atenerse a las consecuencias para la gobernabilidad del país.

9 Comments

  1. PATRICIA, A veces pienso que un paìs sin buenos periodistas, puede caer en desgracia y eso le ha pasado al Perû. Los contados periodistas valientes pusieron el pecho y no les creyeron.Fotos,videos, audios…!habìan pruebas de que eran terrucos…! El Sistema Electoral fue vulnerado y los poderes públicos copados por comunistas. TU PATRICIA estuviste en Lima y de seguro no te permitieron entrevistarlos.TODO SE HIZO A OSCURAS y con trampas. LA OEA ,UE y el gobierno de Bien dieron el visto bueno de elecciones limpias.Elegifo Castillo con campaña de dinero sucio de narcotráfico y climas ahora Pedro Castillo es Presidente. La comunidad internacional no creyō en el fraude y asalto a la democracia y aquì estamos .A mí tampoco me escucharon y me siento molesto conmigo mismo.Ahora a la resistencia. A desafiar a estos malos peruanos y a luchar por la democracia.

  2. Patricia, Castillo tiene los mismos ideales que Cerron, el pais no necesita ni lucha de clases ni odios racistas, necesitamos union, educacion, salud, justicia social, pero lo que estamos viendo en el dia a dia es un asalto a la democracia y desenfadados empeños en tumbarla e instaurar un regimen comunista que solo beneficia a las cupulas como siempre, el clientelismo no tardara en aparecer. Saludos cordiales

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